Ni azul, ni negra, ni
verde, ni naranja. Ni tan siquiera la exitosa roja de hace unos años. Si hay un
color con el que se puede decir que adidas ha pegado el pelotazo en cuanto a las equipaciones
del Real Madrid se refiere, ese no es otro que el rosa de la segunda equipación
de esta temporada. Y así lo reconocen abiertamente responsables de tiendas
oficiales, distribuidores autorizados y hasta la propia marca, reaccia
normalmente a facilitar este tipo de datos.
Un éxito sin precedentes
Cada temporada, las diferentes firmas de ropa
deportiva tratan de dar el pelotazo comercial con el lanzamiento de equipaciones que,
normalmente y en virtud de los acuerdos que tienen pactados con los clubes a
los que equipan, permiten cierto margen de maniobrabilidad y flexibilidad para
que las mismas puedan elegir, por sí sólas, los diseños a implantar, aunque
evidentemente, el consentimiento final lo tienen siempre que dar desde el club.
Así, cuando en Diciembre del año pasado
adelantábamos la noticia de que adidas preparaba una equipación rosa para el
Real Madrid, muy pocos (por no decir ninguno) apostaron por el triunfo y el
éxito de la misma. Tanto es así, que nada más conocerse su lanzamiento oficial,
durante las primeras semanas, incluso hubo un movimiento entre la hinchada madridista para
solicitar a adidas la vuelta a los colores tradicionales y que se dejara de estas aventuras comerciales que iban en detrimento de la
imagen del club.
Triunfa entre los aficionados
Sin embargo, el tiempo ha logrado dar la razón a
los que desde la marca apostaron de manera decidida por este nuevo diseño de la
firma puesto en escena por el conjunto blanco y la firma alemana. Así, el ritmo
de ventas es tal que en muchas tiendas es prácticamente imposible conseguir una
debido a su falta de stock.
Los niños y las mujeres son los que más se han
decantado por esta indumentaria que ha superado en ventas los inicios de otra
exitosa camiseta, la roja de hace unos años, algo que responsables de dichas
tiendas argumentan en que aquella fue una camiseta exclusivamente, de manera
inicial, para la Champions League, por lo que su comercialización no fue de
manera tan inmediata como lo ha sido esta.
Sea como fuere, lo cierto es que las ventas,
gran parte procedentes del extranjero, se han disparado y la demanda de la rosa
del Real Madrid ha hecho que se convierta en una misión casi imposible hallar
un ejemplar en las tiendas.
Hace un par de meses ya hablábamos de las
enormes expectativas que se tenían en el club y en la marca respecto a esta
equipación, expectativas que se han superado con creces en esta ocasión. Por
otro lado, las buenas noticias para la firma alemana son dobles puesto que uno
de los referentes entre los aficionados a la hora de vender esta camiseta es la
del número diez de James Rodríguez.
Miedo al "gafe" de la rosa
Más
pese a todas estas buenas noticias para adidas, una sombra ha comenzado a
ceñirse sobre la marca alemana: que aficionados y jugadores comiencen a
considerar a la exitosa camiseta rosa como gafe, a la vista de los primeros
resultados que con esta camiseta está consiguiendo el conjunto blanco.
No han sido buenas noticias las que, desde el
terreno meramente deportivo, le han llegado a la firma de las tres tiras cada
vez que el Real Madrid ha jugado con la equipación rosa entre la pretemporada y
los dos encuentros que llevamos de temporada 2014/2015. Sin ir más lejos, en el
día de ayer, el conjunto blanco (rosa para la ocasión) caía derrotado con
estruendo por cuatro goles a dos en su visita a San Sebastián para disputar su
segundo encuentro liguero ante el anfitrión, la Real Sociedad.
Y nuevamente, el Real Madrid volvió a vestir de
rosa, equipación con la que cosechó otra derrota tras la que ya obtuviera en
pretemporada ante la Roma, encuentro disputado en los Estados Unidos con el
mismo color. En la marca temen que esa consideración, la de camiseta gafe,
comience a extenderse entre los aficionados madridistas pero, sobre todo, entre
los propios jugadores. El que en la plantilla blanca comience a extenderse que
la camiseta rosa es gafe puede dar como resultado, debido a las muchas
supersticiones que hay entre los jugadores de un club de fútbol, a que comiencen
a dejar de lado a la citada equipación, lo que supondría un serio contratiempo
para la marca alemana en su estrategia para una camiseta, que hasta ahora,
había sido un éxito. Al menos, desde el punto de vista comercial.