El presidente no electo del Barça, Josep María Bartomeu, está
tirando la casa por la ventana. El
máximo mandatario del club azulgrana ha batido este verano el récord de
inversión en fichajes de la historia del Barça: 160 millones de euros. A 20
días del cierre del mercado, Bartomeu ya supera con creces a sus antecesores
más recientes en el cargo, Sandro Rosell y Joan Laporta.
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| Vía: ara.cat |
La
elevada inversión realizada en seis nuevas incorporaciones para el primer
equipo –Luis Suárez (81 millones), Ivan Rakitic (20), Jeremy Mathieu (20), Thomas Vermaelen (15), Marc André Ter
Stegen (12) y Claudio Bravo (12)– tiene varias lecturas. Por un lado, la
renovación de una plantilla de estrellas venidas a menos en los últimos años
que parecían haberse cansado de ganar. Por el otro, la anticipación a una
posible sanción de la FIFA que impida al club firmar nuevas llegadas durante
las próximas ventanas del mercado de fichajes.
Precisamente,
el litigio abierto contra la FIFA podría precipitar un último fichaje este
verano en la posición de lateral. Bartomeu y su director deportivo, Andoni
Zubizarreta, son partidarios de incrementar la competencia en esa posición en
previsión de que la FIFA no levante la sanción y el club se termine quedando
sin poder fichar el próximo verano. En este sentido, el fichaje de Juan
Guillermo Cuadrado es prioritario, pero su elevado coste podría inflar la
'burbuja' veraniega hasta los 200 millones.
Odiosas comparaciones
Este
desembolso sin precedentes también recuerda a los años grises del Barça, con el
presidente Joan Gaspart al mando de la nave azulgrana. El presidente de la
cadena de hoteles Husa gastó 99,5 millones de euros en su primer año –es el
tercer año de más inversión en fichajes en la historia del club– en Overmars, Petit, Gerard, Alfonso y
Dutruel, y dilapidó los 60 millones de euros que ingresó tras la venta de Figo
al Real Madrid.
Laporta
y Rosell fueron más moderados en sus primeros años como presidentes. El abogado
y regidor del Ayuntamiento de Barcelona destinó 47,4 millones de euros a
refuerzos tras su aterrizaje (Ronaldinho, Márquez y Quaresma). Rosell alcanzó
los 73,5 millones en su primer verano, aunque el primer fichaje se lo cerró
Laporta (Villa, Adriano y Mascherano). Entre los dos primeros años de ambos la
cifra resultante (121 millones) no alcanza la inversión realizada por
Bartomeu en su primer verano.
Todo depende de los resultados
Los
160 millones de Bartomeu ya son todo un hito en la historia del club. Sin
embargo, pueden quedar en anécdota si el Barça de Luis Enrique vuelve a la
senda de la victoria y a la conquista de títulos esta temporada. En caso de
otro mal año deportivo, Bartomeu se expondría a abandonar el barco antes de
hora con el dudoso honor de haber sido el presidente más despilfarrador.
Vía: diariogol.com
