El
pasado martes el Real Madrid logró conquistar la Supercopa de Europa ante el
Sevilla. Para ello, entre otras cosas, alineó a una plantilla por la que ha
pagado en los últimos años 637 millones de euros. El mercado de fichajes se
alimenta de expertos ojeadores, pero también lo hace de unos
videojuegos muy especiales que
se han convertido en un poderoso aliado de los clubes.
Vía: futbolia.com |
Lo
demuestra Prozone Sports Ltd., distribuidora del popular Football
Manager de Sports Interactive ha convertido a este
videojuego en una impresionante base de datos -reales, cuidado- en la que se
combinan tanto los detalles de los jugadores y los equipos como vídeos grabados
de decenas de miles de jugadores en todo el mundo. La joya de la corona en este
caso es Prozone
Recruiter la
aplicación que gestiona esos datos y proporciona asesoramiento a algunos de los mejores clubs de
fútbol del planeta.
Aunque
jamás se han dado datos oficiales al respecto se sabe que buena parte de los
clubs más importantes de países como Inglaterra, España, Alemania, Italia, Francia,
Holanda y Rusia basan parte de sus decisiones en el mercado de fichajes en esta
aplicación.
Esa
herramienta lleva dos décadas recopilando datos y
vídeos que "suplementa la intuición de los
ojeadores y entrenadores al ofrecer información detallada del rendimiento de
más de 80.000 jugadores en todo el mundo", afirmaba Thomas
Schmider, CEO de Prozone. La información se recopila gracias a la actividad de
1.300 ojeadores que precisamente se dedican a esta tarea en todo el mundo, y
que hacen de ese proceso algo mucho más potente para los clubes de fútbol.
Estamos
pues ante una nueva demostración de cómo la tecnología ayuda a cambiar (a
mejor, esperemos) el deporte más popular del mundo. Lo ha hecho
en el último Mundial con temas
tan polémicos como los goles fantasmas que
se basan en nuevos sistemas específicamente diseñados para evitarlos. También
conocimos hace poco los detalles de la tecnología implicada en medir la distancia recorrida por los
futbolistas, y la inclusión de dispositivos wearable en estos deportistas
parece inevitable a la hora de recopilar más y más datos sobre su rendimiento.
Vía: xataka.com